Mario Marín, exgobernador de Puebla; se queda en penal del Altiplano

La Fiscalía General de la República (FGR) informó este sábado que un juez ratificó la prisión preventiva para Mario Marín Torres, exgobernador de Puebla, en una audiencia de revisión de medidas cautelares que se llevó a cabo a petición del detenido.

Marín, actualmente recluido en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1 Altiplano, pidió a la autoridad continuar en libertad el proceso que se le sigue por el delito de tortura en perjuicio de una periodista Lydia Cacho.

El exgobernador de Puebla pedía que se le impusieras nuevas medidas cautelares consistentes en residir en un lugar determinado y acudir al juzgado manera periódica para garantizar su presentación al proceso penal.

El juez determinó que las pruebas que le presentaron los Ministerios Públicos de la Federación (MPF), de la Fiscalía Especializada de Control Regional (FECOR), en su Delegación de Quintana Roo y de la FEADLE, perteneciente a la Fiscalía Especializada en Materia de Derechos Humanos (FEMDH), sustentaban que Marín representa un riesgo para la víctima y testigos, existe un riesgo fundado de fuga.

También que existe falta de arraigo del imputado en el lugar del proceso y que, además, los retrasos en el proceso penal son debido a actos procesales de la defensa de Marín.

El proceso que se le sigue deviene de la acusación realizada por la FEADLE por su presunta responsabilidad en valerse de las instituciones públicas del estado de Puebla que se encontraban bajo su mando para llevar a cabo actos de tortura en contra de la periodista Lydia Cacho como castigo a su libertad de expresión.

Mario Marín fue arrestado el 3 de febrero de 2021 en la casa de su hermana en Acapulco, Guerrero, por elementos de la Fiscalía General de la República (FGR). Marín estaba vinculado con el empresario Kamel Nacif, quien también era acusado de tortura contra la periodista.