Aislamiento, alteración del sueño, cambios en la conducta son señales de alerta para prevenir suicidios en adolescentes
Aislamiento, alteraciones del sueño y cambios en la conducta son algunos de los focos rojos que pueden indicar que una persona está en riesgo de atentar contra su vida, explicó la Directora del Centro de Atención al Adolescente, Hilda Estrada Zumaya.
Tendemos a evitar hablar de suicidio, pero es necesario ponerlo en palabras y mencionarlo, porque es una realidad que estamos enfrentando, comentó.
Estrada Zumaya informó que el objetivo de la caminata programada para este martes 10 de septiembre en Piedras Negras es educar a la comunidad para que pueda identificar y reconocer estos focos rojos.
El poder ayudar, canalizar con un profesional y evitar este tipo de tragedias es fundamental. A veces se confunde la tranquilidad o introversión de los hijos, y las familias suelen decir que nunca imaginaron que algo así pudiera ocurrir. Sin embargo, si existen señales de alerta, hay que prestar atención, añadió.
Finalmente, señaló que los familiares de personas que presentan estos indicios también pueden acercarse para recibir orientación y saber cómo ayudar.
La directora del CAAD municipal informó que este año acudieron a una secundaria en Piedras Negras, donde implementaron una brigada multidisciplinaria debido al alto índice de problemas de salud mental entre los estudiantes.
Aunque mencionó que no es posible realizar este tipo de intervenciones diariamente en todos los planteles educativos, señaló que cuentan con una maestra dedicada a impartir temas relacionados en las instituciones, obteniendo buenos resultados.
Respecto al suicidio, la directora subrayó que el tema sigue siendo un tabú y que algunos padres de familia consideran que hablar del tema es incitar a las personas a llevarlo a cabo.
No hay que tener miedo. Cuando vean esos focos rojos, hablen con sus hijos y pregúntenles directamente si han pensado en hacerlo. Existen el pensamiento, el intento y la planeación, advirtió.
Estrada Zumaya agregó que muchos pacientes llegan expresando que lo piensan a diario y que esto les impide dormir. En estos casos, recomendó no regañarlos ni invalidar sus sentimientos.
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