Senadora de EU defiende recortes de Trump al Medicaid: "Bueno, todos vamos a morir"
Las palabras fueron apenas un paréntesis, pero bastaron para transformar una tensa reunión pública en Butler en un episodio nacional: “Bueno, todos vamos a morir”, respondió la senadora republicana Joni Ernst cuando un manifestante le advirtió que los recortes propuestos a Medicaid y al programa de cupones de alimentos (SNAP) “van a matar a la gente.
El intercambio divulgado en redes evidencia la dureza del debate sobre la reforma presupuestaria que impulsa el Partido Republicano y que, según la no partidista Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), podría dejar hasta 10 millones de estadunidenses sin cobertura de salud.
El viernes, Ernst llegó al pequeño condado agrícola para defender el paquete de reconciliación aprobado en la Cámara, que endurece requisitos de trabajo para algunos beneficiarios y recorta pagos a personas “no elegibles”, especialmente migrantes en situación irregular. Cuando explicó que la meta es “centrarse en los más vulnerables”, una voz desde las gradas lanzó: “La gente va a morir”. Ernst, sin titubeo, replicó: “Bueno, todos vamos a morir”.
La sentencia provocó abucheos y risas nerviosas. “¡Por Dios! ¡Por Dios, amigos!”, exclamó la senadora, visiblemente irritada porque —sostuvo— el público “no quiere escuchar” sus argumentos sobre integridad del programa. “Medicaid es extremadamente importante aquí en el estado de Iowa”, añadió, prometiendo que “protegeremos a quienes cumplan con los requisitos de elegibilidad”.
El proyecto republicano, respaldado por el presidente de la Cámara, Mike Johnson, y el presidente Donald Trump, pretende ahorrar al Tesoro decenas de miles de millones limitando beneficios. Incluye un nuevo requisito de trabajo de 80 horas mensuales para adultos sanos sin dependientes y faculta a los estados a verificar ingresos trimestralmente. Para Ernst, se trata de “erradicar los pagos excesivos” y asegurar que “los sobrepagos del SNAP… tendrán que parar”.
Pero los demócratas —y varios moderados republicanos de distritos competitivos— advierten que la reforma golpeará a adultos mayores de bajos ingresos y personas con discapacidad que no siempre pueden cumplir exigencias laborales. En una declaración conjunta, los líderes demócratas de la Cámara calificaron la iniciativa de “increíblemente insensible… quitaría la atención médica y la asistencia alimentaria a millones para dar recortes de impuestos a los ricos”.
Compartir nota