Deja el padre Gilberto Valdés un mensaje póstumo

Días antes de perder la vida, a sabiendas que se acercaba el momento, el padre Gilberto Valdés Alvarado se dio a la tarea de escribir un mensaje, el cual solicitó fuera el leído al momento de despedirlo.

Ante todos los presentes en su misa, se dio lectura a todo lo que el sacerdote quiso destacar de su vida y el mensaje que envió para todos aquellos que lo conocieron y estimaron.

Al iniciar, el sacerdote se manifestó consciente de su enfermedad, la gravedad de la misma y lo prácticamente imposible que sería superarla.

Por ello, se dedicó a agradecer a Dios, su familia, los obispos, sus compañeros sacerdotes y las comunidades en las que ejerció su ministerio sacerdotal.

Dios me ha llamado a la existencia en este tiempo de vida que me concedió vivir y agradezco que me haya concedido nacer dentro de una familia que había escogido desde la eternidad y con esta familia que nos enseñaron a vivir unidos, apoyándonos en todo, escribió el padre.

Detalló su paso por muchas de las parroquias de Piedras Negras, Monclova y la Región Carbonífera donde vivió por años y algunos de los pasajes que más atesoraba.

Al final, pidió perdón por todas las faltas que cometió y escribió: 

Yo acudo a la infinita misericordia de Dios para alcanzar su perdón y me abrace en el manto de la santísima virgen María.