Impuesto del 8 % a videojuegos violentos en México busca contener consumo y aumentar ingresos
El Gobierno de México incluyó en el Paquete Económico 2026 una propuesta para aplicar un Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) del 8 % a los videojuegos con contenido violento, extremo o dirigido exclusivamente a adultos, tanto en formato físico como digital.
La medida forma parte de los llamados impuestos saludables, con el objetivo de desincentivar productos que pueden tener efectos negativos en la salud mental y social. El documento oficial cita estudios que relacionan el consumo de videojuegos violentos con un aumento en conductas agresivas entre adolescentes, así como con problemas de aislamiento y ansiedad.
El gobierno estima que esta medida podría recaudar hasta 183 millones de pesos en su primer año, recursos que se destinarían a programas de salud pública y prevención.
La iniciativa establece que los videojuegos considerados violentos serán aquellos clasificados en categorías C o D (no aptos para menores), conforme al sistema publicado en el Diario Oficial de la Federación. Además, las plataformas digitales que vendan estos productos deberán retener y reportar el impuesto al SAT. En caso de no discriminar entre títulos violentos y no violentos, se presumirá que el 70 % del catálogo corresponde a juegos de este tipo y se aplicará el IEPS al total.
La presidenta Claudia Sheinbaum subrayó que la medida no busca prohibir los videojuegos, sino reforzar la supervisión de los padres sobre el contenido que consumen sus hijos en línea.
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