El padre "Chano" se recupera favorablemente, mientras que el padre Sabino continúa batallando con su diabetes

A dos meses de haber sufrido un infarto, el presbítero Jesús Feliciano Flores Zamora, encargado de los municipios de Guerrero e Hidalgo, se recupera favorablemente.

El departamento de Comunicación de la Diócesis de Piedras Negras informó que el sacerdote va avanzando bien y sigue su proceso de recuperación.

Aunque aún no retoma sus actividades normales, al sacerdote se le ve continuamente en la misa de las 8 de la noche en la parroquia de San Juan, aquí en Piedras Negras, a la cual acude como un fiel más.

Por otro lado, también se preguntó por la salud del padre Sabino Gámez Pérez, a quien se le ha visto continuamente entrar y salir de diversos hospitales.

Sobre su salud, se informó que sigue batallando con secuelas de su diabetes: Su salud se ha visto deteriorada desde hace algunos meses, los ingresos al hospital se han debido a recaídas, se informó.

A pesar de ello, el sacerdote continúa oficiando misa en la capilla San Juan Diego, pues afortunadamente su condición no es grave.

Estamos al pendiente de su estado, indicaron en la Diócesis.