Rusia lanza ejercicios militares cerca de frontera con Polonia y amenaza a Dinamarca por apoyo a Ucrania

Rusia y Bielorrusia comenzaron los ejercicios militares conjuntos Zapad 2025, a escasos kilómetros de la frontera con Polonia, en el marco de una escalada de tensiones con la Unión Europea y la OTAN.

Los ejercicios se extienden hasta el 16 de septiembre. Según datos oficiales de Moscú, participan aproximadamente 13,000 efectivos, con apoyo naval en los mares Báltico y de Barents. No obstante, Ucrania y fuentes de inteligencia en la región estiman números mayores: Kiev afirma que podrían ser hasta 150,000 militares desplegados, aunque Lituania reduce esa cifra a unos 30,000, de los cuales dos tercios estarían en territorio ruso. Las maniobras incluyen uso de vehículos blindados, apoyo de drones y entrenamientos para confrontar columnas enemigas.

En paralelo, Rusia criticó la decisión de Dinamarca de instalar en la ciudad de Voyens una fábrica de combustible para los misiles de largo alcance ucranianos FP-5 Flamingo. Moscú la considera una provocación directa. La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, advirtió que Rusia adoptará “medidas técnico-militares adecuadas para mitigar las amenazas emergentes a su seguridad nacional”.

Los ejercicios Zapad se realizan cada cuatro años desde 2009. Esta edición es más limitada que la de 2021, tanto en tamaño como en disponibilidad de recursos, debido al esfuerzo militar continuo de Rusia en Ucrania. Un misil balístico denominado Oreshnik será parte central de estos entrenamientos. Aunque no se prevé hacer pruebas nucleares, Bielorrusia alberga armas de destrucción masiva rusas desde 2023, lo cual añade preocupación.

Días antes de las maniobras, drones rusos ingresaron en el espacio aéreo de Polonia, generando alarma entre países de la OTAN. Analistas señalan que esta estrategia forma parte de un patrón de Rusia: utilizar maniobras militares y amenazas diplomáticas para intentar influir en las políticas europeas sobre Ucrania.