CAAD atiende contra adicciones también a adultos; aumentan los interesados

Se incrementa la atención de adultos con problemas de adicciones en el Centro de Atención al adolescente, ellos pidieron el apoyo, indicó el Coordinador médico, Loth Tipa Mota Natarén

En el manejo que iniciamos con adolescentes, la mayoría comenzó a acudir y gracias a Dios con el manejo de todos los niveles de aquí del centro con la psicóloga Hilda, el maestro Pedrito Vargas y un servidor en la parte médica, avanzamos bastante en el manejo de los adolescentes, pero sentí yo que cuando llegaban adultos, yo era el que negaba la atención porque es para adolescentes, sin embargo, pedimos el apoyo al DIF y a la alcaldesa porque queríamos tratar también a los adultos y así lo hicimos, agregó.

Explicó que la mayoría de los adultos que llegan responden al manejo y se ha incrementado de forma importante la presencia de ellos solicitando apoyo.

Nos ha llamado la atención que ellos no son traídos a la fuerza, sino que ellos lo piden, comentó.

El coordinador médico del CAAD indicó que se encuentran en atención con ellos adultos adictos al cristal y la marihuana, además de algunos que presentan depresión y ansiedad, a quienes aceptaron ante el incremento en el número de suicidios.

Dijo que se les están brindando ansiolíticos para controlar su desesperación y angustia, su insomnio, han dejado de comer y traen ideas suicidas

Estamos rescatando a muchas personas, es más uno de los casos ya va a empezar a trabajar en el municipio como complemento de su rehabilitación, también como parte de un estímulo de parte del ayuntamiento para respaldarlos y que no se sientan solos, agregó.

Explicó que el deprimido no quiere nada, que quieren estar en su mundo, se sienten abandonados y que tan solo una voz, un abrazo o un tocarles la cabeza, es suficiente para sentir que no están solos o que tienen a alguien.

Loth Tipa Mota mencionó que el adulto tiene más capacidad de tolerar el abuso de drogas, de tal manera que toman una mayor cantidad que el adolescente.

El adolescente con poca cantidad tiene, aunque es el mismo tipo de droga, en ellos tiene una reacción más efectiva y pronto porque el cerebro aún está en maduración, señaló.

Dijo que al final de cuenta todos dejan de comer, de dormir y empiezan a tener trastornos severos con alucinaciones inclusive auditivas y visuales

Prácticamente el cristal los lleva a un trastorno de esquizofrenia que ha llegado a que asesinen o maten a personas inclusive de la misma familia, ellos bajo los efectos de la droga ya no saben ni lo que están haciendo, señaló.