Evitan huelga ferroviaria tras conversaciones maratónicas, se llegó a acuerdo tentativo

Los sindicatos y la gerencia llegaron a un acuerdo tentativo este jueves temprano, evitando una huelga ferroviaria de carga que había amenazado con paralizar las cadenas de suministro de Estados Unidos y elevar los precios de muchos bienes.

El acuerdo con los sindicatos que representan a más de 50,000 ingenieros y conductores se anunció justo después de las 5 de la mañana de este jueves en un comunicado de la Casa Blanca, que lo calificó como una victoria importante para nuestra economía y el pueblo estadounidense.

Se produjo después de 20 horas de conversaciones entre los líderes de los sindicatos y los negociadores laborales de los ferrocarriles organizadas por el secretario de Trabajo, Marty Walsh. Comenzaron su reunión el miércoles por la mañana con el reloj marcando una huelga que estaba programada para comenzar a las 12:01 del mediodía del viernes.

El presidente Joe Biden llamó personalmente para hablar con los negociadores alrededor de las 9 de la noche del miércoles, según una persona familiarizada con las negociaciones. Biden enfatizó que el daño catastrófico podría llegar a las familias, las empresas y las comunidades si el sistema ferroviario se cierra.

El acuerdo no significa que la amenaza de huelga haya desaparecido por completo. El acuerdo debe ser ratificado por los miembros del sindicato. Pero es una buena noticia para una amplia gama de empresas que dependen de los ferrocarriles de carga para continuar operando, y para la economía estadounidense en general. Alrededor del 30% de la carga de la nación se mueve por ferrocarril.

Una victoria para los trabajadores, los ferrocarriles y la economía

El acuerdo otorga a los miembros del sindicato un aumento inmediato del 14% con pagos atrasados que se remontan a 2020, y aumentos totales del 24% durante los cinco años de vida del contrato, que se extiende desde 2020 hasta 2024. También les da bonos en efectivo de $ 1,000 al año.

Pocos otros detalles del acuerdo se han hecho públicos hasta ahora. Pero la declaración de Biden indicó que el principal problema que había llevado al país a un día de su primera huelga ferroviaria nacional en 30 años se había abordado a favor de los sindicatos.

Es una victoria para decenas de miles de trabajadores ferroviarios que trabajaron incansablemente durante la pandemia para garantizar que las familias y comunidades de Estados Unidos reciban entregas de lo que nos ha mantenido en marcha durante estos años difíciles, dijo Biden en un comunicado. Estos trabajadores ferroviarios obtendrán mejores salarios, mejores condiciones de trabajo y tranquilidad en torno a sus costos de atención médica: todo duramente ganado.

La disputa fue sobre la escasez de personal y las reglas de programación que, según los líderes sindicales, habían llevado a sus miembros a un punto de quiebre. Los sindicatos dicen que los ferrocarriles han estado exigiendo a sus miembros que estén de guardia y listos para presentarse a trabajar con poca antelación tan a menudo como siete días a la semana. Los líderes de los dos sindicatos habían dicho que sus miembros no aceptarían un contrato sin cambios en esas reglas de trabajo.

Biden describió el acuerdo como también una victoria para las compañías ferroviarias que podrán retener y reclutar más trabajadores para una industria que continuará siendo parte de la columna vertebral de la economía estadounidense en las próximas décadas.

Es una victoria importante para Biden, que no se enfrentó a nada más que malas decisiones si no se había llegado a un acuerdo. Respaldar la acción del Congreso buscada por la comunidad empresarial para imponer un contrato a los trabajadores habría enfurecido a sus partidarios entre los sindicatos. Dejar que el paro laboral se desarrollara corría el riesgo de consecuencias económicas masivas justo antes de las elecciones de mitad de período.