"¡Asesino, asesino, fuera Rocha!" Manifestantes destruyen oficina del gobernador de Sinaloa
Un grupo de manifestantes irrumpieron en el Palacio de Sinaloa, donde atiende el gobernador Rubén Rocha, rompiendo paredes, computadoras, escritorios y puertas, para exigir justicia por el asesinato de los niños Gael y Alexander Sarmiento Ruiz junto a su padre en un ataque armado.
De acuerdo con reportes en redes sociales, algunas personas llegaron al tercer piso donde está la oficina del mandatario estatal y en medio de los gritos de la protesta, un hombre golpeó una de las paredes del recinto hasta hacerle un hoyo mientras que era alentado por el resto de los presentes.
En primera instancia, los manifestantes llegaron edificio del gobierno estatal donde tras romper los vidrios de la entrada principal ingresaron juntos caminando y gritando: ¡Sáquenlo, sáquelo! El pueblo unido jamás será vencido.
Al llegar al tercer piso, encontraron a la prensa afuera de una oficina, donde al abrir la puerta había una barricada que les obstruía el paso, enseguida con varios objetos empezaron a romper las paredes.
Los manifestantes le gritaban al gobernador: “¡Asesino, fuera Rocha!” ¡Vendido!, además, de una de sus consignas que repitieron momentos antes durante su marcha que partió desde la escuela a la que asistían Gael y Alexander Sarmiento: ¡Con los niños no, con los niños no!.
Horas antes, habitantes de Sinaloa respondieron a la convocatoria para manifestarse en Culiacán vestidos de blanco para exigir justicia por la familia Sarmiento Ruiz, de la cual tres de sus integrantes fueron víctimas de sujetos armados que presuntamente trataron de despojarlos del vehículo donde viajaban, el pasado domingo 19 de enero.
Entre las personas que exigieron justicia en las calles de la capital sinaloense estaban colectivos, padres de familia, niños, estudiantes, que portaron globos blancos, velas blancas, carteles con el rostro de los menores asesinados, además de carteles con peticiones de paz y tranquilidad en la entidad. No más violencia, no más infancias sin vida.
No podemos callar la violencia nos arrancan a nuestros hijos.
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