¡Que ya vienen y nunca llegan! Pide ayuda vecina por drenaje tapado en la Buenos Aires (video)

Una mujer se encuentra desesperada, ya que por más que reporta un problema de drenaje colapsado ante el SIMAS, estos simplemente no le resuelven, por lo que pide apoyo para que la cuadrilla atienda el problema a la brevedad.

La problemática se encuentra en el registro de drenaje del domicilio marcado con el número 817, sobre la calle 20 de Noviembre, en la colonia Buenos Aires de Piedras Negras, y se originó hace un par de semanas con las lluvias registradas en la ciudad.

La señora Isabel Leiva dijo a Noticieros Rancherita del Aire que, desde el momento en que el drenaje se tapó, ha estado llamando al número de SIMAS y, aunque sí le contestan la llamada, solo le dicen que ya están en camino y nunca llegan.

“Estoy llame y llame, tengo el número de reporte y llamo a un licenciado, y nada más me dice, todos los días: voy a tratar de que ya mañana pasen, y ya mañana… y hasta ahorita”, reiteró.

Doña Isabel tuvo que andar sacando el agua y drenaje del registro con botes, para evitar que se desbordara hacia su patio o la calle, ya que el olor es intenso y ha molestado a los vecinos.

“Ya los vecinos hasta se molestaron porque dijeron que me iban a demandar o algo a mí, pues por eso de los desechos. Yo lavo y ya no puedo echar el agua de la lavadora al depósito, por lo que tengo que juntarla en botes y batallar”, dijo.

Doña Isabel sufre de discapacidad por un problema en su pie y tiene que estar medicada; al vivir sola, el problema le complica utilizar los servicios primarios, ya que si usa el agua potable en el baño, lavadora o lavabo, el drenaje termina colapsando.

Puntualizó que cuenta con un número de reporte del SIMAS, pero por más que habla diariamente, le responden siempre lo mismo: que ya van, pero nunca llegan.

Pidió con urgencia una solución, ya que además de su problema, la cuadrilla de SIMAS abrió el pavimento en la casa vecina para una conexión, terminó, pero como no cerraron la zanja y abandonaron la obra, el agua se estancó y se volvió un foco de infección.

“Que por favor me hagan caso, ya me cansé, que me hagan el favor de venir a limpiarme el depósito. Ya hasta para ir al baño se nos dificulta, porque de bajarle, sabemos que se va a volver a llenar y a volver a salir pa’ fuera”, finalizó.